Una boda Original. Gavila Fotografía. Fotos de boda Originales
Hoy es el turno de esta pareja de soñadores a la cual les apasionan las fotos de boda originales. ¿Os ha pasado alguna vez que conocéis a alguien y lamentáis no haberlo conocido antes? Pues es lo que sentí cuando conocí a esta genial y original pareja.
A ella le apasiona el scrapbooking y todo lo relacionado con crear cosas «molonas» y originales a base todo tipo de materiales reciclados. Es por ello que no faltó detalle el día de la boda y resultó muy fácil hacer fotos de bodas originales. Es una tía genial que siempre te recibe con una sonrisa y que nunca te deja indiferente.
Él es muy cariñoso, predispuesto a todo en cada momento, bromista donde los haya y cuida de ella como si de una diosa se tratara. Y por lo visto eso que dicen de quien se junta con un cojo al año cojo y medio, es real.
Ambos juntos se compenetran que da gusto. Impresiona lo cariñosa, divertida, creativa e inspiradora que es esta pareja. No sé si la pareja ideal existe pero si así fuese, sería ésta sin duda alguna.
Marta y Dani, tuvieron desde la primera cita una facilidad extraordinaria para conectar conmigo y, a mi entender, la conexión fue mutua. Tenían claro lo que querían y en esto coincidieron con la mayoría de mis clientes: fotos de boda sin posados. A medida que entrábamos en materia me daba más cuenta de la gran oportunidad que tenía enfrente, sabía que sería una boda especial y esto, sé de buena tinta que a los fotógrafos y videógrafos inconformistas y con inquietudes nos «mola».
Fue una boda civil de temática marinera y se celebró en Molí Canyisset en la Font d’en Carros, un lugar con mucho encanto donde las ceremonias civiles lucen mucho por la estética del espacio.
Como no podía ser de otro modo, la indumentaria de los novios no era la típica de boda. Marta vestía un elegante y a la vez sencillo vestido color rosa pálido de Pronovias y él una chaqueta azul marino con pantalones blancos y pajarita que combinaban a la perfección con la novia.
La orquesta elegida para acompañarlos durante ese día tan especial para ellos fue la Orquesta Diamonds que por su calidad, variedad musical y diversión son siempre una apuesta segura. Para el video contaron con las manitas del videógrafo Ricardo de Tiveus, un gran profesional que sin duda hará de ese evento una obra de arte -Estoy deseando ver la peli-
Como anécdota, cabe decir que no se intercambiaron los típicos anillos, sino que optaron por unas pulseras. Tengo que decir que esto es nuevo para mí pero me demuestra una vez más que los «protocolos» están para saltárselos y que al final uno tiene que hacer lo que siente en cada momento y no obsesionarse en seguir el camino marcado por la sociedad.
Finalmente y para poner la guinda al pastel nos fuimos a París un par de días a realizar las fotos del postboda. Fue una experiencia dura, pero a la vez tan chula que volvería hoy mismo.
Pasado este tiempo puedo decir con gran orgullo que se cumplieron los pronósticos iniciales, la boda fue una de esas que se quedan en la retina para siempre y además puedo decir que me llevo dos nuevos amigos a los cuales, por cierto, les debo una «bona paelleta vora mar».
